24 enero, 2011

[10] Second cap.

Aquella noche también se le hizo imposible conciliar el sueño.
Estaba echada boca arriba en la cama.
Increíble. Mágico. Irreal. Fantástico. Así es como lo podía definir. Bueno, como lo podía definir con las palabras que le habían enseñado, que conocía. Lo había visto, había podido comprobar que era de carne y hueso… ay, ¡estaba emocionada! Se dio media vuelta en la cama. Después de aquel –Hola lo reconoció al instante. Moreno, alto, ojos color miel, y esa sonrisa que tantas veces había mirado embobada cuando él le pasaba una foto suya. Habían pasado el día juntos, dando vueltas por su ciudad. Le había enseñado miles de lugares famosos y otros escondidos que poca gente conocía de igual belleza. Después de varias horas caminando y corriendo de aquí para allá, habían decidido ir a tomarse un helado y bromeando se  habían manchado de nata toda la cara, como niños. Habían dado un paseo por la orilla de una playa agarrados de la mano. Unidos. Por fin su sueño se había hecho real. Su sueño era él, y ahora estaba segura de que nada ni nadie le haría dar marcha atrás. Tantas veces riéndose sola por sus ocurrencias. Tantas veces imaginando como sería su primer encuentro…Todo eso había quedado atrás. Se levantó y decidió encender el portátil, aquella noche iba a ser larga. “Nada es para siempre" le solían decir muchas veces sus amigas. Pero no se podía parar a pensar en algo malo, no en ese momento. Había podido comprobar los sentimientos que tenía hacia él. Su vida había dado un giro de 360º, y todavía no se terminaba de acostumbrar a aquella extraña realidad. En los tests de amor que alguna vez le habían pasado de pequeña siempre preguntaban: ¿Piensas en él continuamente? ¿Lo echas de menos cuando no está contigo? ¿Crees que serías su media naranja? Sonrió como lo había hecho en aquel entonces. Y esta vez conocía la respuesta. Estaba enamorada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario